Cesal e.V./Berlín, Alemania:


Cesal e.V./Berlín, Alemania:
Centro de estudios y Solidaridad con América Latina

29 de noviembre de 2010

La socialdemocracia española y el terrorismo de Estado.


“En tiempos infames como el actual en que reina la mentira, decir la verdad es una acto revolucionario”  George Orwell.

            En la universidad chilena en la que me forme humana y profesionalmente en la década de los sesenta, desaparecida por la dictadura de marras, nos planteábamos un primer desafío: Luchar por un mundo libre de mordacidad, virulencia e insidiosidad, de las hostilidades de grupos o fracciones dogmáticas y capaz de realizar la felicidad para todos mediante la cooperación, la amistad y el respeto entre las personas. Queríamos ver un mundo en el cual la educación es un instrumento humanizador y liberador por excelencia y no un negocio que enajena a la gente, en el contexto de perpetuar lo mejor de nuestra cultura y prevenir el olvido. Entendíamos que la esencia de la democracia es la superación individual y social del ciudadano, con una sociedad sin odiosas marginaciones. La justicia la veíamos como una necesidad social, porque el Derecho es la regla de la vida para la asociación política y la discusión de lo justo. Lo propio de la justicia es darle a cada ciudadano lo suyo. Ella no puede ser lo que más le conviene al poderoso. Y, la Libertad, nuestra Libertad, la de los disidentes y no la que han tratado de imponernos los dueños del dinero, la que se ha convertido en un privilegio de los satisfechos dueños de la celestina universal: ¿una utopia? Si, pero entendiéndose por ella al concepto histórico que dice relación con un proyecto de transformación social de la sociedad capitalista enferma, sin valores e inhumana, un cambio de fondo y de forma que trae la justicia social.
            ¿Qué paso con nuestro proyecto, con nuestro desafío, la construcción de un modelo de sociedad a escala humana teniendo al Estado como una comunidad de ciudadanos, a la educación como un fin en la formación de personas razonables, capaces y solidarias? El capitalismo salvaje globalizado con el apoyo de la iglesia católica y la administración de nuestros lideres revolucionarios de ayer, hoy “socialistas renovados”, mejor dicho “socialdemócratas” nos imponen un sistema económico y político globalizado escandalosamente injusto que no tiene futuro y que se disfraza de destino.  El mañana también es hoy. El individuo tiene que ser obediente, sumiso y aceptar la humillación como un modo de vida inevitable para la Humanidad. La globalización del capital termina con las fronteras para el dinero e impone una cultura única del terror y la basura que se entrega machacando a través de los medios mediáticos de comunicación y especialmente por Internet: esta cultura del miedo nos impone un maravilloso modo de vivir y morir. Es la base de su democracia y su libertad. El individuo enajenado es  tan libre que tiene el “derecho” de elegir su modo de morir: de hambre o aburrimiento. Pero nadie hace nada por falta de coraje civil y porque es lo que hay, esta de dios y éste lo quiere así…

La España monárquica franquista profunda, socialdemócrata y Felipe González su líder natural.

            El modelo de sociedad de la España monárquica profunda fue impuesta por el “Régimen canalla/USA” a través de la dictadura franquista fascista y que termino de imponerse con el mal llamado proceso de transición a la democracia. Mientras que en la Alemania y la Italia arrasadas se colgaban nazis y fascista en nombre de la justicia, de la democracia y de la libertad. En la España Fascista franquista no se movía una hoja de un árbol sin el visto bueno del terrorista dictador Francisco Franco Bahamonde, “Caudillo por la gracia de dios”, según la jerarquía de la Iglesia católica y en especial del Opus Dei, con un millón de victimas del terrorismo de Estado, que hasta nuestros días esperan verdad, justicia y reparación digna…
            El trabajo sucio en la construcción de este patético modelo de sociedad consumista, católico, reaccionario globalizado, ha estado bajo la administración de la socialdemocracia con el control superior de los hijos y nietos de la dictadura fascista terrorista franquista a través del partido popular. En este modelo orweliano se entiende por pensar el decir dos mentiras a la vez que se cree en ellas y olvidar todo hecho que no convenga recordar. La mentira se mantiene delante de la verdad. Así la clase política de la España Franquista profunda ha construido su modelo enajenante de sociedad que tiene como base la mentira generalizada y que ha logrado detener el curso de la historia, gracias  al milagro por delegación del dios católico y la ayuda de los medios mediáticos de comunicación y de la jerarquía de la Iglesia Católica.
           
            Recientemente, el locuaz administrador de este orweliano modelo de sociedad, Felipe González, líder natural de la socialdemocracia española en una inmodesta y lata entrevista al Diario El País, que ya nadie lee, declaro: Tuve que decidir si volaba a la cúpula de ETA –como Presidente del Gobierno español-, y dije No, y no se si hice lo correcto”. Los que luchamos por la vida, señor González, no tenemos dudas como las suyas. Para nosotros, la ética es la base de la conciencia moral del Ser Humano y la persona. Lo ético y lo moral es lo honesto. No existen ellas sin una radical honestidad. Ellas demarcan la frontera entre lo lícito y lo ilícito, lo correcto y lo incorrecto, etc. Son una exigencia de la vida social, tan indispensable para la salud de ésta como el aire para la vida humana. Esto seguirá siendo así, aunque hoy ocurra, especialmente en su España profunda, monárquica franquista, como el agua en el tiempo de sequía que escasea cuando más se lo necesita.
            La derecha franquista, el Partido Popular, aclarando las graves afirmaciones de su administrador Felipe González, puntualizo: “Los 57 muertos por el GAL –aparato paramilitar creado por el régimen que presidía Felipe González-, fue un enfrentamiento entre los que defendían la libertad y los derechos de todos los ciudadanos y los que intentan acabar con estas conquistas de la democracia.” Esta aclaración, no aclara nada, por el contrario oscurece más la España franquista profunda…
            Como colofón acentúo que no entiendo la zalagarda, el alboroto y las escaramuzas de algunos miembros de la clase política española, sugiriendo que el ideólogo de la socialdemocracia española y ex presidente de gobierno Felipe González, “debería ir a la cárcel por sus palabras sobre la ETA”: ¿Con que justicia? La justicia franquista existente se ha negado por décadas a hacer justicia por los crímenes de lesa Humanidad de la dictadura terrorista franquista a través de  la búsqueda de la verdad y la reparación digna para un millón de victimas del terrorismo de Estado.
            La desvergüenza, la inmoralidad, de los dirigentes del PSOE, la socialdemocracia española ha atiborrado, llenado todos los medios mediáticos de comunicación globalizados, afirmando “que rechaza buscar rédito político azuzando fantasmas del pasado”: ¿Se refieren a las victimas del Terrorismo de Estado de la dictadura fascista de Franco? Terminan su declaración afirmando que “su partido socialdemócrata, el PSOE ha defendido la libertad y el Estado de Derecho para que el terrorismo desaparezca”  Pero cuidado con confundirlo con el Terrorismo de Estado, garantía de la democracia, de la libertad y la justicia en la medida de lo posible en la España Profunda monárquica franquista. Hoy en banca rota y con casi 5 millones de cesantes oficialmente reconocidos por los administradores temporales de ella: el régimen de socialdemócrata de Rodríguez Zapatero.
            Después de leer la entrevista de marras de Felipe González puedo puntualizar que la envergadura histórica, moral y ética de la clase política española tan profundamente oscura que ha desbordado a los historiadores, sociólogos, sicólogos, etc.
            Nosotros entendemos -la clase política española no-,  que todas las personas han sido creadas diferentes por la Madre Naturaleza, pero iguales en Derechos inalienables entre los que se encuentran: la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad por los que lucho y fue bestialmente asesinada por el régimen socialdemócrata alemán Rosa Luxemburgo. Cuando un régimen conculca estos derechos el Pueblo tiene  derecho a cambiarlo e instituir uno nuevo.
            La desesperanza de la mayoría del Pueblo español no nace ante una obstinada adversidad, ni en el agotamiento de una lucha desigual, proviene  de que no se perciba más las razones para luchar e incluso, de que no se sepa si hay que luchar…


Prof. Dr. Hugo Moreno Peralta
Director

El holocausto de la Humanidad.


E-Mail:cesal_ev_berlin@yahoo.de
Prof. Dr. Hugo Moreno Peralta
Director
Casilla 8129, Viña del Mar 2, Chile.

“En tiempos infames, como éste, en que reina la mentira, decir la verdad es un acto revolucionario”  George Orwell.

“Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en si el decoro de muchos hombres”. José Marti Pérez, Maestro libertador de la Patria Continente,  Latinoamérica.

            1984, la obra genial de George Orwell escrita al calor del apogeo del stalinismo, en la Unión Soviética, tiene el gran valor de haber proyectado la pesadilla de la Vulgata capitalista salvaje globalizada, que hoy vive la Humanidad, en el marco de un feroz totalitarismo, en el cual, los nuevos medios científicos/tecnológicos utilizados por el “Estado canalla/USA” y sus incondicionales epígonos y testaferros han transformado el mundo en un monstruoso imperio de verdugos y victimas, que pululan y que por sus comportamientos más bien parecen fantasmas grotescos: Dráculas y Frankensteins de la política, que propagan la muerte lenta o rápida, a balazos o por la enajenación sistemática de millones de individuos. Yo he recomendado a mis estudiantes leer y volver a leer, mejor dicho, estudiar esta genial creación literaria de Orwell, con mucha atención.
            El gran hermano de turno, del “estado canalla/USA”, es tanto más dueño de la vida y del pensamiento de las gentes por cuanto utiliza un elemento infalible en la dominación, que lo constituyen: el poder bélico, las drogas del narcotráfico, el fundamentalismo religioso de la Iglesia Católica, a través del Opus Dei y los medios mediáticos de comunicación globalizados.
            El individuo/masa enajenado, la mayoría de la Humanidad, es un fanático ignorante y crédulo de un paraíso que no acaba de llegar. Que cambió su libertad por su seguridad, y que finalmente se ha quedado sin ninguna de las dos. Es fiel, al perverso sistema capitalista salvaje hasta el extremo que sus instintos son ortodoxos a esta fascista ideología. No tiene opinión, es neutral, no tiene idea de nada, es apolítico –una forma de hacer política la más perversa y reaccionaria, es un ser incapaz de pensar sobre cualquier tema. No es bueno ni malo, es indolente…
            Los epígonos, testaferros, cipayos y paniaguados, de este irracional e inhumano modelo de sociedad capitalista salvaje son fáciles de reconocer por su verborrea estereotipada, por su rastrerismo, por la proliferación de los lugares comunes típicos de la doctrina stalinista. Hoy se les llama “stalinistas renovados” y administran con mucha eficiencia, sumisión y fidelidad los intereses de los dueños de la celestina universal, sus patrones, las oligarquías empresariales citadinas y agrícolas, y en especial las empresas multinacionales.

Los medios mediáticos de comunicación globalizados.

            En el modelo de sociedad orweliana capitalista a la masa de individuos enajenada se le ha engañado con el cuento de que los medios mediáticos globalizados constituyen un poder independiente. En la realidad la prensa, la radio, la televisión y la Internet forman parte de grandes corporaciones monopólicas. Ningún periodista en el “estado canalla/USA” se atrevería a escribir que la política exterior de los Estados Unidos esta determinada por los intereses de los grupos monopólicos del poder económico: las empresas multinacionales. No nos puede sorprender que en los Estado Unidos y en la Comunidad Europea arcaica no haya noticias…
            En las universidades en general, en las escuelas de periodismo enseñan a los futuros periodistas a ser objetivos y neutrales. Escribir los hechos objetivamente es hacerlo en el marco de una objetividad ideológica capitalista. Hay muchas técnicas manipuladoras para dar impresión de neutralidad, de objetividad. En el “estado canalla/USA” y en sus satélites, las empresas dueñas de los medios mediáticos de comunicación chantajean a los partidos políticos y a los regimenes políticos de turno: objetividad-neutralidad por el control publicitario. En Chile, el diario El Mercurio, oráculo de la oligarquía empresarial fascista agrícola y citadina y de la clase política pinochetista/concertacionista, por su “objetividad y neutralidad” recibe del Estado el 60% de los avisos, además de jugosas subvenciones. El fascista dueño de El Mercurio, Agustín Dummy Edwards fue el principal cómplice del magnicidio del Presidente Dr. Salvador Allende Gossens, repite, siempre: “Quien no se publicita y publica en El Mercurio, esta muerto”…
            El “Estado canalla/USA”, como dueño del destino de la Humanidad cuando invade Irak, Afganistán, derroca al legitimo gobierno de Honduras, mantiene un criminal bloqueo a Cuba, lo hace en defensa de la libertad y la democracia y contra el “comunismo” ayer, y hoy contra el terrorismo. La burocrática Naciones Unidas y su Consejo de Seguridad siempre están sumisamente a la orden de quien financia su arcaica e incompetente organización: Los Estados Unidos. En esta agotadora, diurética y turística existencia de la burocracia de naciones Unidas y de la Comunidad Europea y de la OTAN, los funcionarios conciliadores neutrales saben que su labor es imperfecta y que se enmarca en una doble moral enajenante, agresiva, inquisidora que los miserables esgrimen y los cobardes temen. En el marco de ella sus intervenciones deben ser superficiales, asegurando que los poderosos intereses del imperialismo capitalista salvaje no sean tocados. Mientras los problemas de la Humanidad se siguen aumentando: el peligro que corre la biosfera, el funesto saqueo rapiña y devastación del depredador capitalista salvaje, con la irreparable destrucción de los elementos naturales de la vida. ¿Cuál es la reacción de la burocracia ante la complejidad de los problemas señalados, por solucionar? Reuniones, discusiones, turismo, y mucho café. Estos funcionarios políticos a nivel nacional e internacional, ya no están a la altura de sus obligaciones.
            La reiterada y proclamada indignación contra el despotismo del “Estado Canalla/USA” por su barbarie fascista, su desprecio por la mayoría de los países subdesarrollados, encierra unas medidas de moral y honradez intelectual con cuta ayuda no solo pueden desenmascararse los ya pasados o actuales intentos de esclavización de la Humanidad, sino también los venideros por muy solapados que se nos presenten. Pero este mundo que mayoritariamente día a día se deja traicionar y encadenar, pareciera, que en el marco del fundamentalismo católico, la resignación, es inevitable el fin de la historia humana. Por favor, no me vengan con la bellaquería que todos somos culpables del holocausto de la Humanidad, porque esto significa que nadie es culpable…
            La lucha de Seres Humanos universales que reiteradamente han formulado la salvación de la humanidad mediante la transformación del individuo masa enajenado en una persona conciente, ha sido en vano. Para alcanzar este desafío hay que comprometerse con una refinada ofensiva de acción purificadora, desalienante, que sacuda la voluntad a tanta gente enajenada por el consumo y el fundamentalismo religioso católico y la saque de su marasmo. Pero es muy difícil que la mayoría de los individuos masa enajenados pueda aprender a respetarse, a quererse ellos mismo en el marco de la orweliana sociedad capitalista salvaje globalizada…
              La lucha contra el “Estado canalla/USA” y sus aliados, no es fácil, y puede transcurrir mucho tiempo antes de que el cambio se haya producido. Pero, la minoría conciente de la Humanidad que lucha por la vida no puede permitirse el lujo de darse por vencida.
            Renan afirmó: “El gran progreso de la reflexión moderna a sido sustituir la categoría del Devenir a la categoría del Ser, la concepción de lo relativo a la concepción de lo absoluto, del movimiento a la inmovilidad.”  Pocas sentencias son más justas que la de este maestro del existencialismo.
            La ideología fascista del “Estado canalla/USA”  ha destruido y ha asesinado a millones de seres humanos inocentes con la misma brutalidad con la que ha bloqueado la continuidad histórica del pensamiento y la cultura, a través de los medio mediáticos de comunicación globalizada, de la educación objeto, etc., al mismo tiempo que levanta un veto radical con la prohibición de toda reflexión sobre la realidad social, es decir, sobre su propia realidad histórica y humana…
            En los tiempos difíciles que vivimos el deber de toda persona conciente, es no sólo conocer los peligros, sino examinarlos serena y racionalmente, a pesar de la consciencia de su magnitud. El mundo de “1984”, tal y como lo imagino Orwell y que el “Estado canalla/USA” nos esta imponiendo no durara mucho. Será el preludio del holocausto de la Humanidad.

Entre la criminal indiferencia y la criminal complacencia.
           
            Se mata cuando se cierran los ojos ante la guerra, el hambre, la prostitución infantil y juvenil, la miseria, la pobreza y la infamia. Se mata cuando por cobardía, comodidad y oportunismo se contempla indiferente las bellaquerías del “Estado canalla/USA” y sus instituciones muertas en la sociedad e consumo: Naciones Unidas, la OTAN, la OEA, FMI, BM, BID, el modelo de Estado impuesto, la escuela, la universidad, la religión, etc., y se aprueban por acción u omisión hipócritamente, en lugar de luchar contra ellas, en el marco de la resignación fatalista: es lo que hay, esta de dios, dios lo quiere así.
            Como colofón, afirmo, así como la propiedad privada es un robo, toda falta de reconocimiento de lo que es la vida, toda indiferencia, toda complacencia, hipocresía, no es otra cosa que matar. No sólo se puede matar el presente, sino también el futuro. Quien pudiera sacar de su indeferencia a la mayoría de la gente. Es indignante pensar que tengan que seguir adelante las espantosas e inútiles matanzas en Palestina ocupada por el Sionismo israelita, en Irak, Afganistán, etc. El individuo masa enajenado vive al día, sin pensar  y permite que se produzcan tantos horrorosos crímenes: “Sólo merecen la vida y la libertad quienes cada día las conquistan” Dr. W. Goethe.

Prof. Dr. Hugo Moreno Peralta
Director